Lumbalgia en adultos mayores: causas y síntomas
Aproximadamente el 80% de la población mundial es afectada por esta enfermedad en algún momento de su vida, la lumbalgia es una condición que una persona adulta aprende a sobrellevar de manera más o menos funcional. Sin embargo, para los adultos mayores las cosas pueden complicarse.
Cerca del 30% de las personas que padecen lumbalgia en México requieren incapacidad y en particular, las personas mayores de 60 años de edad son más propensas a sufrir dolores relacionados con la degeneración de las articulaciones de la columna vertebral, síntomas que pueden reflejarse en pérdida de movilidad o lesiones que disminuyen su calidad de vida, de no recibir atención médica profesional oportuna.
Porque sabemos que te preocupas por la salud de toda tu familia, en este artículo te compartimos las causas y síntomas más comunes del dolor lumbar en adultos mayores.
Signos de alerta
Probablemente, y durante la convivencia cotidiana, habrás observado algún deterioro en la funcionalidad y condiciones físicas de tus familiares de la tercera edad, sin saber que se trata de complicaciones de la lumbalgia.
Así, la sintomatología es tan variada como las posibles causas, mismas que a su vez pueden estar relacionadas con otras enfermedades como la osteoporosis o, inclusive, la depresión.
A continuación describimos tres causas posibles de la lumbalgia en adultos mayores y sus principales manifestaciones.
1. Estenosis del canal lumbar o espondilolistesis degenerativa
Tanto la estenosis vertebral –el estrechamiento del canal de la columna cervical (cuello) o lumbar (espalda)– como la espondilolistesis degenerativa –cuando una vértebra se desliza hacia adelante sobre la de abajo– son dos condiciones que aparecen por el desgaste de las articulaciones, propio de la edad.
En ambos casos, lo que genera la lumbalgia es la compresión de la médula espinal y de las raíces de los nervios lumbares. Esto deriva en que el adulto mayor experimente un dolor de pierna agudo, principalmente al estar de pie y caminando normalmente.
Los síntomas son de evolución lenta y varían entre graves y leves, o incluso pueden pasan días sin hacer su aparición. Otras manifestaciones asociadas son:
- Incapacidad para caminar mucha distancia sin tener dolor en la pierna
- Dolor lumbar que se alivia poco después de sentarse
- Debilidad, adormecimiento y hormigueo que se irradian de la parte inferior de la espalda a las nalgas y las piernas (ciática).
2. Artrosis de las articulaciones facetarias
Afección degenerativa de lenta evolución, la artrosis de las articulaciones facetarias provoca un recrudecimiento de la lumbalgia acompañado de entumecimiento, dolor que suele ser más pronunciado a primera hora de la mañana y otra vez al final del día.
El dolor es causado por la degeneración del cartílago que separa la articulación que forman las láminas de dos vértebras superpuestas. En su fase inicial el dolor lumbar puede ser escaso, y poco a poco puede volverse más constante o incluso derivar en ciática.
Asimismo, este tipo de lumbalgia puede manifestarse de las siguientes formas:
- Dolores que interrumpen el sueño
- Dolor palpable en un área localizada de la columna
- Dolor sordo, continuo o intermitente en la parte inferior de la espalda, que se agrava después de la actividad física
- Entumecimiento o pérdida de flexibilidad en la espalda que deriva, por ejemplo, en la incapacidad de doblarse por la cintura con comodidad.
3. Aplastamiento vertebral
En una persona con osteoporosis, un leve golpe en la espalda o hasta el movimiento brusco provocado por un estornudo puede representar una fuerza excesiva sobre la columna, que a su vez resulte en una fractura o aplastamiento vertebral.
Para los adultos mayores, esta condición puede derivar en dolores de espalda de aparición repentina, además de una pérdida de estatura (de hasta 15 centímetros) y una postura encorvada o cifosis (conocida también como “joroba de viuda”).
Como regla general, la osteoporosis en mujeres posmenopáusicas y el uso prolongado de corticoesteroides aumentan las posibilidades de un aplastamiento vertebral. Otros síntomas asociados a la lumbalgia de este tipo son:
- Dolor intenso al estar de pie o al caminar, pero que disminuye al recostarse boca arriba
- Flexibilidad limitada de la columna
- Deformidad y discapacidad
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Opciones de tratamiento
Para todos los casos, la indicación principal es llevar a tu familiar a examinación física para que el médico prescriba los estudios clínicos, tratamientos farmacológicos o quirúrgicos que le ayuden a combatir sus síntomas.
Una opción complementaria al tratamiento de la lumbalgia, y que ha probado ser muy efectiva en casos de dolor crónico que limita la movilidad en adultos mayores, es la fisioterapia Redcord de rehabilitación con cuerdas.
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